Todos hemos experimentado el estrés de algún modo, ya sea en el trabajo o por alguna situación personal. Los kabbalistas dicen que el estrés en realidad es un foco rojo que indica que es hora de salir de tu zona de confort en esa área de tu vida que te está estresando. Tomemos como ejemplo el carbón, que al someterse a una alta presión se convierte en un precioso diamante; imagínate que el universo hace lo mismo con nosotros, cuando nuestro potencial es mayor a lo que estamos dando o nuestras posibilidades de mejorar nuestro entorno son mejores que las que tenemos ahora, comenzamos a sentir altos niveles de estrés, pero es una forma que el universo tiene de presionarnos para decirnos “actúa ya”.
Si quieres hacer frente al estrés para superar tu zona de confort y sentirte mejor, toma en cuenta estas prácticas:
- Organiza tu tiempo: Agenda y planifica, éste sin duda puede que sea uno de los tips que más te hacemos, pero es que la organización de tu tiempo es invaluable. Realmente puede ser el primer gran paso para dejar de tener estrés.
- Prepárate por las noches para el día siguiente: Dedícate un tiempo de la noche anterior a elegir tu ropa, preparar tu comida, llamar para confirmar citas o simplemente planear una salida con tus amigos después de trabajar. Esos minutos ahorrados por la mañana significarán mucho.
- Mantente activo: Hacer algún tipo de actividad física, desde el crossfit hasta el yoga, o simplemente salir a caminar, te ayudará muchísimo a desahogar todas tus preocupaciones.
- Ríe mucho: Aunque la sonrisa y la risa son una reacción espontánea, debes hacerte a la idea de que es necesario dejarte fluir y darte permiso de reír y divertirte más, pues hay muchas cosas en el día con las que podríamos soltar una carcajada y tal vez ni siquiera lo notamos o lo dejamos pasar por estar tan ocupados en otro tipo de asuntos.
- Aprende a respirar: Inhala y exhala, pero hazlo constantemente. ¿Por qué crees que este tipo de respiración ayuda tanto al hacer ejercicio? Pues porque al llenar los pulmones oxigenas todo tu cuerpo, y con esto el cerebro. Por lo tanto el respirar profundo y pausado te ayudará a pensar mejor y tener más claridad de tus ideas.
- Duerme bien: Este es otro consejo que nunca dejaremos de darte y repetir, pues el descanso es lo más importante que hay y el momento en que tus células y todo tu cuerpo se regenera, así que considera cada noche como una especia de renovación y nunca te robes horas de sueño.