Nos han enseñado a ser tan modestos que a veces caemos en la negación de reconocer nuestros propios atributos y logros personales, pues creemos que es algo soberbio y hasta mal visto. Pero parte de una sana inteligencia emocional es entender lo importante que es sentirte orgulloso de ti mismo y ¿por qué no? premiarte de vez en cuando. Así que la próxima vez que te digan lo bueno que eres en algo o tengas éxito en eso por lo que tanto trabajaste no dudes en aceptar el cumplido y poner en práctica los siguientes consejos:
- Da las gracias: Nunca disminuyas tu esfuerzo ni creas que evadir un reconocimiento o un cumplido es más educado. Parte de un buen Branding Personal está en saber dar las gracias y afrontar tus logros.
- Prémiate: Haz cosas que te hagan sentir bien y regálate algo valioso, y no necesariamente económicamente hablando. Por ejemplo si tiempo es lo que te falta para disfrutar de tus actividades personales, date tiempo para descansar, desconectarte del teléfono, computadora o cualquier medio por el que te puedan localizar y sal a caminar, toma una siesta, ve al gimnasio o toma una sesión relajante en un spa.
- Comparte con tus seres queridos: Compartir no es una cuestión de presunción, vale la pena que hables de lo que te hace sentir orgulloso y compartir esa felicidad con tus amigos y familiares, esas personas que sabes que se alegrarán contigo y celebrarán tus éxitos así como te han apoyado en tus fracasos.
- Aprovecha esa motivación: Cuando algo sale bien, nos viene esa sensación de éxito y que somos capaces de lograr cualquier cosa que nos propongamos. Haz buen uso de esa motivación y plantea nuevos objetivos, planifica y organiza tus siguientes actividades para el logro de próximas metas.
- Nunca te confíes: Cuando te felicitan debes alegrarte, pero recuerda que siempre se puede mejorar. Proponte sorprender a los que están a tu alrededor con nuevos y mejores resultados, perfecciona tus habilidades y no te conformes con lo que has dado, esto te traerá cada vez más satisfacción personal.