El mercado laboral está saturado, y como consecuencia, encontrar trabajo se ha convertido en una tarea difícil. Cuando llevas varios meses buscando trabajo y te encuentras desesperado, muchas veces terminas aceptando cualquier oferta sin pensar en los pros y los contras. Pero a pesar de que te encuentres en una situación difícil, es importante que trates de tomarte un tiempo para analizar la situación. A continuación te damos algunas recomendaciones de las cosas que debes considerar antes de aceptar una oferta laboral.
¿Dónde está la oficina?
Averigua dónde se encuentra la oficina a la que tendrás que ir a trabajar y considera los costos y el tiempo que gastarás para llegar ahí todos los días. ¿La oficina está demasiado lejos de tu casa? ¿Vas a tener que gastar mucho dinero en transporte o gasolina? ¿Estos gastos van afectar tu presupuesto mensual? ¿Cuánto te vas a tardar en llegar a la oficina? Toma en cuenta todos estos puntos antes de decidir si vas aceptar la oferta de trabajo. Si la oficina está muy lejos y vas a gastar gran parte de tu sueldo en transporte, tal vez no valga tanto la pena.
¿Cuanto te van a pagar?
Definitivamente el sueldo es una de las cosas más importantes que debes considerar antes de aceptar una oferta de trabajo. Pregúntate a ti mismo si crees que el sueldo es justo y si éste corresponde con las funciones que desempeñaras dentro de la empresa. Haz bien tus cuentas y analiza si el sueldo te alcanzará para mantenerte a ti mismo y a quienes dependen de ti. Si este es tu primer trabajo y no tienes mucha experiencia, lo más seguro es que te ofrezcan un sueldo bajo, pero recuerda que al no tener experiencia no puedes exigir que te paguen más.
Tip: Para ver si el sueldo que te están ofreciendo es el correcto, compáralos con otros del mismo puesto y campo de trabajo.
¿Cuál va a ser tu horario de trabajo?
Antes de aceptar cualquier puesto es fundamental que tomes en cuenta los horarios de trabajo que tendrás que cumplir. Aunque al principio puedas estar desesperado y creas que puedes aguantar todo, debes pensar bien las cosas. Averigua el número de horas diarias y totales que tendrás que trabajar, si vas a tener que ir a la oficina los fines de semana y cuáles serán tus días de descanso. Además si crees que el trabajo será muy pesado y ves que la mayoría de los empleados tienen que quedarse a trabajar horas extras, pregunta si éstas se pagan aparte.
¿Tendrás crecimiento profesional?
Uno de los elementos claves que debes considerar antes de aceptar una oferta de trabajo es el crecimiento laboral. Puede ser que al principio esto no te importe, ya que tal vez lo único que quieres es empezar a trabajar para ganar experiencia. Pero no te apresures y piensa si tienes oportunidades de desarrollo y crecimiento dentro de la empresa. Fíjate si la empresa es grande o pequeña y trata de ver si sigue creciendo o va de caída.
Tip: Aunque al principio no parezca importante el no tener oportunidad de crecimiento, eso hará que después de un tiempo empieces a sentirte desmotivado.
¿Cómo es el ambiente de trabajo?
Aunque al principio el ambiente de trabajo puede parecer algo insignificante, es importante que pienses que pasarás la mayor parte de tu día conviviendo con el resto de la gente que trabaja ahí. ¿Se ve que al gente es agradable? ¿Crees que puedas llevarte bien con todo el equipo de trabajo? Para que tu desempeño dentro de la empresa sea bueno y puedas ir a trabajar con ganas, es fundamental que te lleves bien con tus compañeros de trabajo. Al final ellos serán quienes te puedan guiar y ayudar cuando tengas alguna duda o problema.
¿Cuáles van a ser tus responsabilidades?
Por último, además de tomar en cuenta todas las cosas que te hemos mencionado anteriormente, también es fundamental que desde el inicio pidas que te den una lista de tus responsabilidades. Analízalas y decide si crees que puedas llevar a cabo cada una de ellas. Si tienes alguna duda acerca de una de tus responsabilidades, ¡pregunta! Siempre será mejor que aclares todas tus dudas antes de comprometerte a cumplir con todas esas tareas.
Ya que hayas logrado contestar todas estas preguntas, tómate unos días para pensar y analizar la situación. Haz una lista con los pros y las contras que tiene el puesto tomando en cuento todos los elementos mencionados anteriormente. Si al final los pros son mayores que los contras entonces el trabajo es perfecto para ti. Aunque siempre habrá momentos buenos y malos, si tienes un buen sueldo, te gusta el ambiente de la empresa y puedes tener crecimiento profesional, estamos seguros que cuando vayas a trabajar lo harás con la mejor actitud.